DÍA 24 - EJERCITANDO LOS DONES.

“De manera que si un miembro padece, todos los miembros se duelen con él,
y si un miembro recibe honra, todos los miembros con él se gozan. Vosotros,
pues, sois el cuerpo de Cristo, y miembros cada uno en particular” (1° Corintios
12:26-27).

Somos parte de un cuerpo y para que ese cuerpo avance necesitamos estar unidos a los demás miembros. Nos necesitamos y todos somos importantes para el crecimiento de la iglesia. Así como damos lugar a discipulados también debemos crear el espacio para que cada discípulo encuentre el espacio para ejercitar los dones que recibió de Dios. Hacer discípulos es ser puentes para que otros lleguen aún más lejos, ministerialmente hablando. Puede que destinemos como iglesia mucho tiempo al entrenamiento y la enseñanza de nuevos discípulos pero si no damos la oportunidad de servicio seguramente ellos se irán a otro lugar que sí lo hagan. Si quiere tener gente que haga lo que usted
quiere, y a su manera, entonces no necesita tener discípulos, consiga un empleado que actuará de acuerdo al sueldo que usted le pague. Pero si de discípulos se trata entonces motive a que ellos descubran los dones y acompáñelos en todo para el desarrollo de los mismos. Recuerde que no
está solo en esta tarea, Jesús lo prometió: He aquí yo estoy con vosotros todos los días, hasta el fin del mundo.

- OREMOS PARA QUE DIOS NO DÉ LA SABIDURÍA DE GUIAR A QUE OTROS DESCUBRAN Y EXPERIMENTEN SUS DONES.
- ROGUEMOS QUE NUESTRAS IGLESIAS SEAN UN CAMPO DE DESARROLLO
DE PERSONAS CONSAGRADAS A DIOS.
- PIDAMOS POR LOS LÍDERES DE LA IGLESIA, PARA QUE ELLOS SEAN SABIOS EN DAR OPORTUNIDADES DE SERVICIO.