“Entonces viendo el denuedo de Pedro y de Juan, y sabiendo que eran hombres
sin letras y del vulgo, se maravillaban; y les reconocían que habían estado conJesús” (Hechos 4:13).
El discípulo de Cristo es alguien que recibe retiene y entrega. Recibe todo del Maestro, lo retiene poniéndolo por obra en su propia vida y lo entrega a los que están a su alrededor. Muchos discípulos sólo reciben y retienen pero no dan nada a otros, sólo cuando se cumplen los tres pasos se experimenta un fluir del Espíritu y un crecimiento.
Es imposible hablar de discipulado sin demostrar un crecimiento espiritual en el servicio y en llevar el mensaje de Cristo. Tal como les pasó a Pedro y Juan, que otros puedan ver el testimonio de nuestro
crecimiento espiritual, producto del encuentro con Jesús.
- OREMOS PARA QUE LOS DISCÍPULOS DE CRISTO NO DESCUIDEN EL
CRECIMIENTO ESPIRITUAL CONTINUO.
- OREMOS PARA QUE OTROS PUEDAN VER EL TESTIMONIO DE NUESTRO
ENCUENTRO CON JESÚS.
- PIDAMOS A DIOS QUE EN NUESTRAS IGLESIAS SE EXPERIMENTE EL
FLUIR DEL ESPÍRITU SANTO CAPACITÁNDONOS PARA EL DISCIPULADO.
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