PALABRA DEL PROFETA CHUCK PIERCE

Escucho al Señor hablándonos, les digo que algunos de ustedes se preguntan ¿por qué está sobre ustedes este calor que quema durante los días con más de 100 grados (40° centígrados)? Pero yo les digo que hay semillas en el campo al que les estoy enviando, que tengo que consumir. Hay semillas que fueron sembradas en la temporada pasada que deben ser quemadas, para que no puedan desarrollarse más.

Yo les digo que estoy completando una temporada para terminar malas semillas o semillas equivocadas, que pudieran traer una cosecha equivocada. También les digo que estoy listo para hacer llover sobre las semillas que han sembrado en justicia, porque algunos de ustedes dicen:--he sembrado, sembrado y sembrado una y otra vez, y no he visto a mi campo salir con la cosecha que yo esperaba. Yo les digo ¡Miren! Porque voy a comenzar a llover para que en este año comiences a brotar. En esta lluvia voy a llover por doce lluvias venideras y voy a traer semillas que ustedes han sembrado en los doce últimos años. Semillas que han sembrado en una administración, que yo sé que no necesariamente deberían brotar en esta administración, ahora florecerán, así dice el Señor. Semillas que produzcan vino salvaje y uvas salvajes las voy a secar.

Les digo que ahora voy a podar uvas que necesitan ser podadas en el año venidero y les voy a dar un vino que no habían probado. Les digo que un vino de milagros ha sido preparado para que mi pueblo beba.

Así que sepan que cuando salgan a su campo conmigo, vuestro campo ha sido definido (establecido) este año, vuestro campo ha sido ajustado este año, vuestro campo ha sido refinado este año, y el campo que pensaban estar en el principio de este año, no es el campo por el que entrarán por la puerta que les estoy abriendo ahora. En algunos campos estoy removiendo estructuras completas de temporadas pasadas, de manera que puedan entrar.

Les digo que voy a comenzar a despertarlos para que puedan ver la senda del campo que tengo para ustedes, porque los he posicionado para una temporada, y he construido una puerta y ahora la puerta está abierta, para vuestro próximo campo.

Les digo que ustedes se pararán y verán cosechas llegando a ser realidad a vuestro alrededor, para mi pueblo que no escuchó de cosecha en la última temporada, ellos no vieron cosecha en la plenitud que había planeado, pero ahora, comenzado desde ahora, ustedes se pararán, escucharán y verán una cosecha brotar.

Sus hijos e hijas comenzarán a profetizar; la generación de los 80 va a comenzar a soñar sueños; la generación de los 60 van a comenzar a entrar en una fuerza triunfante; la generación de los 50 van a comenzar a entrar en una esfera de gozo que se habían perdido en los últimos 50 años; la generación de los 40 van a comenzar a decir ¡el desierto no nos va a capturar!; la generación de los 30 dirán: llámame Señor porque aquí estoy; la generación de los 20 se van a levantar y decir: júntanos, energízanos, danos los recursos y déjanos brotar como una generación y un ejército victorioso en los días venideros; la generación adolescente desde ahora brotará con fe triunfante; y la generación que se está formando (infantil) será una generación de David, que se levantará con nuevos sonidos.

Yo les digo, vuestro campo está preparado, ¡entren a vuestro campo para el futuro!