NAVIDAD O FIESTAS SOLEMNES: UN NUEVO DILEMA

FIESTAS SOLEMNES

Colosenses 2:16-18 Por tanto, nadie os juzgue en comida o en bebida,  o en cuanto a días de fiesta,luna nueva o días de reposo, todo lo cual es sombra de lo que ha de venir; pero el cuerpo es de Cristo. Nadie os prive de vuestro premio, afectando humildad y culto a los ángeles, entremetiéndose en lo que no ha visto, vanamente hinchado por su propia mente carnal,

Soy una persona que cree fuertemente en la importancia de las fiestas solemnes, solo este 2014 tuvimos tres eventos en días que en el calendario judío corresponden a fiestas solemnes, “pascua: la noche de las generaciones”, “pentecostes: guardianes de la cosecha”, “puertas eternas” en los días del sucot, sin embargo no podría considerar pecador, o creer que Dios no les está hablando a aquellos que no las celebran, sencillamente porque para hacer eso, tendría que arrancar de la biblia estos versículos expuestos, como también el libro de Romanos, Gálatas, Hebreos, etc. Donde se especifica claramente que la ley ha sido cumplida en Cristo, y las fiestas solemnes son parte medular de esta ley que Cristo cumplió, para que el Reino se establezca en la tierra, sobre judíos y no judíos, ya no por una genealogía y sacerdocio de la carne, sino como hijo por la fe.

Jesús mismo deja claro, que el Reino de Dios es un gobierno distinto a la era de Moisés, no por que se desentienda de esta, ya que la ley ahora estaría escrita en los corazones, posicionando los principios de esta, pero no sus rituales, como la circucision física, ¿en algún momento Jesús le pide a sus discípulos de forma explicita, que continúen celebrando las fiestas judías?,¿los apóstoles le pidieron a los gentiles que como condición de ser parte de la iglesia, ellos celebraran las fiestas judías?, nunca lo hicieron, tampoco Pablo en sus epístolas se lee que exija a los no judíos celebrar estas fiestas, sino más bien, se esfuerza por hacerles ver a sus hermanos, que Cristo es el cumplimiento y encarno, la torah, sus demandas ritualistas y sus fiestas solemnes, para escribir los principios y la revelación de estas cosas en nuestros corazones, las fiestas deben ser encarnadas en nosotros, y volvernos un altar, un cordero pascual, una enramada, una cosecha.

Las fiestas solemnes Dios las llamo "perpetuas", por que Cristo es eterno, y el hecho de que el las encarnara, la pascua, pentecostés, sucot, etc, las hace perpetuas, pero no el ritual judío en sí mismo al pie de la letra, sino los principios y revelación de Cristo que ellas representan, así yo las celebro, de esta manera podemos hacer uso de lo que el Señor es, para pararnos proféticamente, unir cielo y tierra en estas fechas del calendario judío y hacer que el reino de Dios se manifieste en poder,como también fechas de nuestro calendario gregoriano, son usados aveces proféticamente por el Señor para llevar acabo sus propósitos, ¿esta limitado el Señor a un calendario?, claro que no, El es eterno.

Si quisiera celebrarlas con la rigurosidad de la ley, debería ser circuncidado y comprar cada año varios pasajes a las tierras palestinas, porque muchas de estas fiestas exigían estar en el templo físico en Jerusalén (del que queda solo un muro), como requisito indispensable en toda fiesta. 

Algunos hermanos han planteado entonces, que al ser establecidas fiestas solemnes desde la antigüedad, Dios solo reconocería estas fechas y no otras, estas celebraciones serían las únicas que el consideraría importantes y en las que el manifestaría su presencia, como lo hacía en los días de la ley de Moisés.

Esta afirmación es correcta solo hasta cierto punto, y es que Cristo no está limitado a las fechas del calendario judío para celebrar, Cristo es antes que la ley, que los calendarios, que el sol y la luna, y antes que el tiempo, no podemos limitarlo a fechas, si fuera de esta manera, nuestros cultos, eventos y congresos no tendrían su presencia, si reuniera a mis hermanos para celebrar la titulación de una carrera o el nacimiento de un hijo, y me centrara en dar gloria a Dios por estas cosas, ¿el Señor faltaría a esta celebración solo por no ser una fiesta solemne?, sin duda él se haría presente, donde dos o tres invoquen su nombre.

Las fiestas solemnes tenían una intención más amplia que la simple alegría, buscaban elaborar una cultura, ¿logro su efecto en los judíos?, en lo que respecta al ritual, si lo logro en algunos tiempos, en lo que respecta a la revelación, no pudo lograrlo, de otra manera no habrían terminado cautivos en babilonia, por los griegos o romanos, ni habrían crucificado a Jesús, no por causa de las fiestas no lo lograron, sino porque el Espíritu Santo y el gobierno de Dios no se hacían presentes aun y todo permanecía en las sombras, como bien lo explica el escritor de Hebreos.

FIESTAS NO JUDÍAS COMO LA NAVIDAD

Sabemos que Jesús nació en Sucot, en las fechas de Diciembre, esto calculando desde que Juan el bautista es anunciado por Gabriel, a su padre Zacarias, sacerdote de la octava orden de Abias, este dato nos permite hacer el cálculo desde el mes que corresponde a esa orden, cuando Zacarias ve a Gabriel quien le anuncia sobre Juan, contar seis meses más hasta que Gabriel visita a Maria, y desde hay nueve meses más, me da la segunda quincena de Septiembre, fechas en las que se celebraba Sucot, es interesante como Cristo nace en un pesebre, figura de las enramadas que los judíos hacían para recordar la fidelidad de Dios, dándole el cumplimiento preciso a esta fiesta, el mismo apóstol Juan dice “el verbo se hizo carne y habito (hizo tienda) entre nosotros”.

Si Jesús nació en Septiembre es claro que el 25 de Diciembre no fue su nacimiento, un poco de historia nos haría ver, que los dioses solares y otros demonios fueron los venerados esos días, Mitra, Saturno, Odin, etc…el mismo “arbolito de pascua” es representación de otras entidades más, esto sin mencionar la cantidad de espíritus ligados al consumismo y la miseria financiera que son también soltados ese mes, nos da un caldo de cultivo del desastre.

¿Podemos celebrar el nacimiento de Jesús ese 25 de Diciembre?, en estricto rigor, podemos celebrarlo cualquier día, su nacimiento, ministerio, muerte y resurrección, celebrarlas los días que queramos, de hecho lo hacemos en cada culto, celebramos a Jesús, su persona, mensaje y propósito.

¿Debemos mimetizarnos con el verde y rojo de santa Claus y el árbol?, pienso que es tiempo de liberarnos de estos símbolos alejados de Cristo, con sabiduría y determinación, pero no dejar la casa vacía, ni esa noche ir a dormir temprano, sino transformar mi casa en un altar de adoración y celebrar a Cristo, sin gorros rojos, sin pinos piramidales (sin duda quitarlos generara las preguntas de tus familiares), reunir mi familia y hacerlos reflexionar, que Cristo no nació en Diciembre, sino que se hizo un tabernáculo entre nosotros, de esta manera ir separándome de la cultura de mercado de la noche de navidad, e ir moviéndome a una cultura de Reino, que no está limitada solo a las fiestas solemnes, sino que debemos desarrollarla completamente como iglesia.

Un ejemplo muy interesante es lo que se da en el día de la reforma, que en Chile es por ley "el día de la iglesia evangélica", que coincide con las celebraciones del Halloween, en vez de disfrazarse de angelitos tratando de “abuenar” la fiesta, deberíamos resaltar el día de la reforma, celebrarlo como un día importantísimo, no encerrarnos a escondernos, porque las fiestas son culturales y encerrarnos no nos permitirá transformarla para nada, deberíamos reunir nuestros niños para cubrirlos y hacerles ver lo importante que fue lo que hizo Lutero y como Dios continua reformando su iglesia en cada generación, no es una fiesta solemne judia, pero si es una fiesta de la iglesia actual.

ESTE DICIEMBRE

Este mes de Diciembre seremos bombardeados por mensajes navideños de consumo, y símbolos que no son de Cristo, si decides no celebrar nada esa noche, si tu autoridad espiritual te recomendó abstenerte de celebrar y esa noche acostarte temprano, bien haces, nadie que se haga llamar hermano podría criticarte o condenarte por eso, Dios bendecirá tu obediencia y determinación, pero si tu pastor te a dado la opción de decidir que hacer y en tu corazón decides reunir a tu familia y verdaderamente celebrar al Señor (no solo por su nacimiento), con entendimiento, lejos de los símbolos que conllevan otra cultura, haces mejor, porque estas contribuyendo a separar esta mezcla y ofrecer un camino más excelente, porque generar cultura no solo es, arrancar de lo falso o desarraigar lo que Dios no planto, sino que plantar semillas que el todos los días está ofreciendo.

¿No aborrece Dios las mezclas?, y por esto mismo nuestra casa debe marcar una diferencia, al entrar en ella, el que la visita debe notar donde esta nuestro corazón, porque esta aversión a las mezclas que Dios tiene, no esta relacionada con cosas materiales que desgastan con el tiempo, sino con el interior.

Levítico 19:19 "no sembraras con mezcla de semillas, y no te pondrás vestidos con mezcla de hilos", 

Si quisiéramos ser literales en esta orden, deberíamos partir por quemar todas nuestras ropas que en sus etiquetas dice "50% algodón y 50% poliester", por las mezclas de hilos, ¿esta preocupado Dios de esto?, ¿o su molestia con las mezclas esta centrada en la inclinación del corazón?, ciertamente en el interior es donde Dios esta interesado y por lo mismo, acostarnos temprano el día 25 de Diciembre no impedirá que el resto del mes los niños no sean bombardeados de "semillas diversas" de consumismo y falsos dioses, entonces veo como necesario, proveerles de una altar mayor, donde la simiente que habita en ellos pueda expresar de manera abundante, su diferencia con el mundo.

Así que hermanos, no dejemos que Diciembre contribuya a otra nueva división en la iglesia, que si eres bautizado sumergiéndote o por aspersión, si predicas persona a persona o a voz en cuello, si eres de Pablo o de Cefas, si tu iglesia tiene profetas o no, si decides adorar a Cristo el 25 de Diciembre o dormir temprano, decide en tu corazón según la convicción y la revelación que Dios puso en ti, desechando divisiones y la mutilación del cuerpo de Cristo.

Simón Aquino

Hijo de Elohim