PROMESA

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martes, 28 de enero de 2014

LA MESA ESTA SERVIDA

16 Toda la Escritura es inspirada por Dios, y útil para enseñar, para redargüir, para corregir, para instruir en justicia,17 a fin de que el hombre de Dios sea perfecto, enteramente preparado para toda buena obra. 2° de Timoteo 3:16-17

En los últimos tiempos hemos aprendido el real significado de "Mi pueblo perece por falta de conocimiento",  teniendo en cuenta que para adquirir este conocimiento solo es necesario leer la Escritura y nada mas, y que el mismo Espíritu Santo nos guiara a todo conocimiento, haciéndola Rema, dándonos vida,  es  como un hombre que muere de sed rodeado de agua pura y cristalina para beber.
Hace unos años mi madre nos leyó un cuento a mis hermanos y a mí, decía algo parecido a lo siguiente:
Un joven durante mucho tiempo ahorro para poder viajar de su ciudad en Europa hasta América, tras muchos sacrificios y mucho trabajar consiguió el dinero del boleto para un barco de pasajeros.
El viaje duraría mas de veinte días, luego de tener el billete en sus manos lo acaricio como un tesoro y lo guardó esperando con ansias el día en que el viaje comenzaría.
Aunque un poco preocupado porque si bien el dinero le alcanzo para el boleto no era suficiente para comprar comida abordo por lo que hizo un atado con fruta y comida que pudo reunir, la raciono para cada día, lleno de agua unas botellas y las puso junto con la comida.
El día llego, y con sus tesoros se subió al barco, un marinero lo acompaño a su camarote, era pequeño pero tenía todo lo necesario para su comodidad. En un armario guardo su "tesoro" y se preparo para el viaje.
Cada día racionaba sus pobres provisiones, salia a caminar por la plataforma del barco a modo de ejercicio, no quería mantener contacto con el resto de los pasajeros para evitar explicar su situación, así pasaron los días que duraba el viaje.
Al llegar al puerto, se acerco a uno de los marineros feliz porque había soportado toda la travesía, que le pregunto como había estado su viaje y le respondió :
 - Es  solo cuestión de proponérselo, pude viajar sin gastar un centavo en comida, comí únicamente lo que yo traje.
Se sentía muy orgulloso por su hazaña.
El marinero lo miró y moviendo la cabeza le respondió:
-Chico, en el precio del boleto iba incluida la comida y la bebida, las mesas estaban llenas de alimento fresco para que lo comieras cuando quisieras. 

No es que no haya alimento fresco de parte de Dios para nuestras vidas, ni  que haya que pagar un precio muy alto. Es solo cuestión de entender que así mismo el que rescato nuestras vidas de las garras de la muerte, será él quien la complete como dice en Filipenses 1:6
 Estoy convencido de que Dios empezó una buena obra entre ustedes y la continuará hasta completarla el día en que Jesucristo regrese.
Solo está en nosotros buscarlo porque la mesa que nuestro Padre ha preparado para sus Hijos esta extendida con manjares y delicias.
Para que las comamos en presencia de nuestros enemigos y así demostrarle que no le tememos.
Así como la mujer que rogó por un milagro y a la que Jesús le dijo que no estaba bien darle la comida de los Hijos a los perrillos, y ella acepto las migajas que caían de la mesa, hoy muchos se conforman con las sobras lo que cae, lo que no alimenta.
El Padre no hace diferencia de Hijos, no le da un alimento mas nutritivo a un hijo que a otro.
Él está esperando que tomes tu lugar en la mesa, ese lugar ya fue pagado por la sangre de Cristo, solo debes tomar lo que ha preparado para tu vida. A fin de que estés preparado para toda buena obra.


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