Alguna vez te
conté que en alguna esquina de la vida, puedes toparte con ese verdadero amor
con el que siempre soñaste y guardaste en tu corazón de quinceañera. Alguien
que con solo mirarte te derrite el corazón. No es imposible que cada noche
quieras irte rápido a la cama para permitirte soñar con ese amor que te
ocasiona cosas que pensabas que ya no eras capaz de sentir.
Ahora, es
también probable que hayas sufrido muchos desengaños amorosos, tal vez estés
tan desencantada que te cuesta mucho confiar en los hombres y tienes miedo de
volver equivocarte. Más aún: es posible que esta sucesión de errores te impida
reconocer y definir lo que significa conocer a un hombre bueno que sea capaz de
enamorarte. Al fin y al cabo, el problema está en que siempre te sentiste
atraída por los hombres que te han causado dolor, te han roto el corazón o lo
que es peor, no te han valorado. Elegiste mal tantas veces que puedes llegar a
creer que no existen hombres honestos, bondadosos o maduros. Pero eso no es
cierto.
Como te dije
una vez: ¡Claro que existe ese amor de las películas! Por supuesto que existe
ese hombre que con solo mirarte unos segundos puede desnudarte el alma y
dejarte expuesta como a una niña. Te doy mi palabra de honor que existe ese
hombre con el poder de derretirte solo con su mirada y que logra estrujar tu
corazón con una sonrisa. Ese hombre está en alguna parte, tal como lo soñaste.
No te conformes con menos de lo que siempre quisiste que te pase.
La gran
pregunta consiste en: ¿Cómo reconocerlo? Y aunque no existe una fórmula mágica
para encontrar al hombre de tu vida, de igual modo puedo ayudarte contándote
algunos detalles que estoy seguro que te harán muy bien, si tan solo observas
tu propio corazón.
En primer
lugar comienza por fijarte en cómo te sientes cuando estás a su lado o piensas
en él. Las mujeres que siempre han identificado el amor con el sufrimiento, no
se dan cuenta de hasta qué punto sus parejas las han hecho sentirse mal. Están
acostumbradas a experimentar tensión, dificultades, y hasta su estima está
dañada y no se han dado cuenta. Se sienten pequeñitas y frustradas. Y aún creen
que eso es amor. Pero no lo es. El amor te conduce a sentirte bien, fuerte,
grande, poderosa, espléndida. Y sabes que vas por buen camino cuando el hombre
con el que te estás relacionando hace que te sientas así:
1) Llena de
energía: Después de pasar un rato con él, o incluso cuando te preparas para
verlo, tu cuerpo vibra, tu mente vuela y te sientes ligera, creativa, con ganas
de comerte el mundo. Alguien que realmente te ama, no te quita la energía, no
te drena, sino que te potencia, te da fuerzas para continuar con tu día y proyectar
cualquier cosa que te propongas.
2) Valorada:
Él te respeta y lo demuestra con su forma de hablarte y de tratarte. Sientes
que puedes confiar en él, deshacerte de las máscaras que suelen ponerse las
mujeres para los desconocidos e ir un paso más allá, abriéndole el corazón como
nunca lo hiciste con nadie. No tienes nada que ocultar, y tampoco tienes ganas
de hacerlo.
3) Atractiva:
Es su forma de mirarte la que potencia lo mejor que tienes y hace aflorar tu
belleza interior. A su lado te olvidas de cualquier complejo y saca la mejor
versión de ti. El verdadero amor siempre te rejuvenece y te hace más bella.
4) Relajada:
Cuando estás con él, eres tú misma. No necesitas inventarte un personaje ni
pretender que eres distinta o (supuestamente) mejor. Es más, si lo haces por un
momento, el aire se enrarece porque él te quiere tal y como eres. Cuando puedes
ser completamente auténtica, es porque estás enamorada de alguien que no
pretende cambiarte. Él te ama cuando te enojas, cuando te muerdes los labios,
cuando se sonrojas, cuando estás triste, eufórica o cuando te mueres de celos.
Podrías hacer un berrinche, y aun así, solo lograrías que él te amé más.
5) Alegre:
Porque te hace reír cuando te cuenta cosas. ¡Tanto que cuando vuelves a casa y
recuerdas la anécdota que te ha contado, te vuelve a dar risa! Alguien que
puede hacerte sonreír o soltar una carcajada, es porque realmente se las
arregló para construir un puente que va directo a tu corazón.
6) Libre:
Adoras estar o hablar con él y siempre tienes ganas de volver a verlo. Pero no
estás ansiosa. No temes que se olvide de ti. Además, él respeta tus planes y no
interfiere en tus amistades o tus actividades; solo sabes que estará allí cada
vez que lo necesites.
7) Poderosa:
La relación con él saca lo mejor de ti porque se interesa por tu vida, tus
sueños, tu historia. No se queda en lo superficial, sino que sabe atravesar la
barrera social y hacerte preguntas muy personales, y sin embargo no invasivas,
con las que te ayuda a reflexionar y por lo tanto a crecer. Si te hace pensar
en cosas que nunca habías pensado, es porque también logró construir un puente
directo a tu mente.
8) Importante:
Él te dedica tiempo y toda la atención del mundo; cuando le hablas, sientes
como si todo el resto del mundo se esfumara para él, solo importa cada palabra
de lo que le dices, y lo que es mejor, las recordará una por una. Cumple su
palabra y te llama si dijo que lo haría. Y cuando te tiene delante te demuestra
cariño con gestos, miradas, abrazos, siendo tierno, teniéndote en cuenta en
todo momento.
9) Espiritual:
Cuando más lo conoces, mas amas a Dios. En lugar de alejarte de las cosas
espirituales, sientes que estás más cerca que nunca del Señor. Te sientas
agradecida y feliz por esta etapa que te toca vivir. Literalmente ilumina tu
vida.
En cuanto a
los hombres, solemos ser más básicos. Sé que algunas mujeres son dulces por
naturaleza, pero recuerda que una mujer sensible que se permite llorar o
emocionarse, derrite a cualquier hombre. Si eres dulce, sensible y lo haces
reír, es todo tuyo. Se auténtica, se tu misma, espontánea, imprevisible; eso
siempre resulta irresistible. Se buena conversadora. A los hombres sí que les
gusta hablar, siempre y cuando estén frente a alguien que sepa escuchar.
Un hombre
también se va a enamorar de ti, si cuando están juntos, siente que puede ser él
mismo, si se siente seguro al expresar sus sentimientos más íntimos. Pronto se
va a dar cuenta de que te extraña, comienza a notar que tu presencia le es cada
vez más indispensable. Cuando un hombre se siente cómodo y seguro a tu lado,
comienza a extrañarte más y su amor por ti crece día a día. Y lo más extraño es
que ni siquiera sabe por qué se siente así. Lo que sí sabe es que hay algo
especial en ti, algo que provoca emociones que no siente con ninguna otra
mujer.
No te conformes con
menos de lo que te mereces. Recuerda que mientras alguien te grita, hay un
hombre deseando hablarte al oído. Mientras alguien intenta humillarte, hay un
hombre dispuesto a recordarte que eres una gran mujer. Y mientas alguien te
hace llorar, hay un hombre que solo pretende robarte una sonrisa.
Solo tienes que saber elegir bien, y para
ello, no se trata de saber si él reúne las cualidades del hombre perfecto, sino
en cómo te hace sentir. Si le prestas atención a como se siente tu corazón cuando
estás con él, es imposible que te equivoques.