PROMESA
miércoles, 30 de abril de 2014
DÍA 16 DE LA CUENTA DEL OMER
Hoy es el día 16, son dos semanas y dos días de la Cuenta del Omer.
31 Señor, yo confío en ti;
no permitas nunca que sea yo avergonzado.
¡Ponme a salvo, pues tú eres justo!
2 ¡Inclínate a escucharme!
¡Ven pronto en mi ayuda!
¡Sé tú mi roca fuerte, la fortaleza que me salve!
no permitas nunca que sea yo avergonzado.
¡Ponme a salvo, pues tú eres justo!
2 ¡Inclínate a escucharme!
¡Ven pronto en mi ayuda!
¡Sé tú mi roca fuerte, la fortaleza que me salve!
3 Ciertamente, tú eres mi roca y mi castillo;
guíame; encamíname por causa de tu nombre.
4 Sácame de la red que me han tendido,
pues tú eres mi refugio.
5 En tus manos encomiendo mi espíritu;
¡ponme a salvo, Señor, Dios de la verdad!
guíame; encamíname por causa de tu nombre.
4 Sácame de la red que me han tendido,
pues tú eres mi refugio.
5 En tus manos encomiendo mi espíritu;
¡ponme a salvo, Señor, Dios de la verdad!
6 Señor, yo confío en ti,
pero odio a los que adoran ídolos huecos.
7 Yo me lleno de alegría por tu misericordia,
pues tú has tomado en cuenta mi aflicción
y conoces las angustias de mi alma.
8 No me has puesto en manos de mi adversario;
más bien, me has plantado en lugares amplios.
pero odio a los que adoran ídolos huecos.
7 Yo me lleno de alegría por tu misericordia,
pues tú has tomado en cuenta mi aflicción
y conoces las angustias de mi alma.
8 No me has puesto en manos de mi adversario;
más bien, me has plantado en lugares amplios.
9 Ten misericordia de mí, Señor,
porque estoy muy angustiado.
Mis ojos se consumen de tristeza,
lo mismo que mi alma y todo mi ser.
10 Mi vida se va consumiendo de dolor;
mis años transcurren en medio de suspiros.
La maldad acaba con mis fuerzas,
y hasta mis huesos se van debilitando.
porque estoy muy angustiado.
Mis ojos se consumen de tristeza,
lo mismo que mi alma y todo mi ser.
10 Mi vida se va consumiendo de dolor;
mis años transcurren en medio de suspiros.
La maldad acaba con mis fuerzas,
y hasta mis huesos se van debilitando.
11 Todos mis enemigos se burlan de mí,
y más aún mis vecinos;
¡soy el hazmerreír de mis conocidos!
Los que me ven en la calle, huyen de mí.
12 Me han olvidado, como a los muertos;
hasta parezco una vasija hecha pedazos.
13 Puedo oír cómo muchos me calumnian:
«¡Hay terror por todas partes!»,
y mientras tanto, todos conspiran contra mí
y hacen planes para matarme.
¡Sólo piensan quitarme la vida!
y más aún mis vecinos;
¡soy el hazmerreír de mis conocidos!
Los que me ven en la calle, huyen de mí.
12 Me han olvidado, como a los muertos;
hasta parezco una vasija hecha pedazos.
13 Puedo oír cómo muchos me calumnian:
«¡Hay terror por todas partes!»,
y mientras tanto, todos conspiran contra mí
y hacen planes para matarme.
¡Sólo piensan quitarme la vida!
14 Señor, yo confío en ti,
y declaro que tú eres mi Dios.
15 Mi vida está en tus manos;
¡líbrame de mis enemigos y perseguidores!
16 ¡Haz brillar tu rostro sobre este siervo tuyo!
¡Sálvame, por tu misericordia!
y declaro que tú eres mi Dios.
15 Mi vida está en tus manos;
¡líbrame de mis enemigos y perseguidores!
16 ¡Haz brillar tu rostro sobre este siervo tuyo!
¡Sálvame, por tu misericordia!
17 Señor, no permitas que sea yo avergonzado,
porque a ti te he invocado.
¡Que sean avergonzados los impíos!
¡Que enmudezcan en el sepulcro!
18 ¡Que sean silenciados los labios mentirosos,
esos que hablan mal del hombre honrado
y lo tratan con soberbia y desprecio!
porque a ti te he invocado.
¡Que sean avergonzados los impíos!
¡Que enmudezcan en el sepulcro!
18 ¡Que sean silenciados los labios mentirosos,
esos que hablan mal del hombre honrado
y lo tratan con soberbia y desprecio!
19 ¡Cuán grande es tu bondad,
la cual reservas para los que en ti confían!
¡Delante de todos la manifiestas
a los que en ti buscan refugio!
20 En lo más recóndito de tu presencia
los pones a salvo de la maldad humana;
les das refugio en tu tabernáculo;
¡los pones a salvo de las malas lenguas!
la cual reservas para los que en ti confían!
¡Delante de todos la manifiestas
a los que en ti buscan refugio!
20 En lo más recóndito de tu presencia
los pones a salvo de la maldad humana;
les das refugio en tu tabernáculo;
¡los pones a salvo de las malas lenguas!
21 ¡Bendito seas, Señor!
¡Grande ha sido tu misericordia por mí!
¡Me pusiste en una ciudad fortificada!
22 En mi angustia llegué a pensar
que me habías apartado de tu vista,
pero tú escuchaste mi voz suplicante
en el momento en que a ti clamé.
¡Grande ha sido tu misericordia por mí!
¡Me pusiste en una ciudad fortificada!
22 En mi angustia llegué a pensar
que me habías apartado de tu vista,
pero tú escuchaste mi voz suplicante
en el momento en que a ti clamé.
23 Ustedes, fieles del Señor, ¡ámenlo!
El Señor cuida de quienes le son fieles,
pero a los que actúan guiados por la soberbia
les da el castigo que merecen.
24 Ustedes, los que esperan en el Señor,
¡esfuércense, y cobren ánimo!
El Señor cuida de quienes le son fieles,
pero a los que actúan guiados por la soberbia
les da el castigo que merecen.
24 Ustedes, los que esperan en el Señor,
¡esfuércense, y cobren ánimo!
MES DE IYAR - 2° SAMUEL 22
22 David dedicó este cántico al Señor cuando el Señor lo libró de Saúl y de todos sus enemigos. 2 Éstas son sus palabras:
«Señor, tú eres mi roca y mi fortaleza
¡eres mi libertador!
3 Dios mío, tú eres mi fuerza;
¡en ti confío!
Eres mi escudo, mi poderosa salvación,
¡mi alto refugio!
Salvador mío, tú me salvas de la violencia.
4 Yo te invoco, Señor,
porque sólo tú eres digno de alabanza;
¡tú me salvas de mis adversarios!
¡eres mi libertador!
3 Dios mío, tú eres mi fuerza;
¡en ti confío!
Eres mi escudo, mi poderosa salvación,
¡mi alto refugio!
Salvador mío, tú me salvas de la violencia.
4 Yo te invoco, Señor,
porque sólo tú eres digno de alabanza;
¡tú me salvas de mis adversarios!
5 »Los lazos de la muerte me rodearon;
¡me arrolló un torrente de perversidad!
6 Los lazos del sepulcro me rodearon;
¡me vi ante las trampas de la muerte!
7 Pero en mi angustia, Señor, a ti clamé;
a ti, mi Dios, pedi ayuda,
y desde tu templo me escuchaste;
¡mis gemidos llegaron a tus oídos!
¡me arrolló un torrente de perversidad!
6 Los lazos del sepulcro me rodearon;
¡me vi ante las trampas de la muerte!
7 Pero en mi angustia, Señor, a ti clamé;
a ti, mi Dios, pedi ayuda,
y desde tu templo me escuchaste;
¡mis gemidos llegaron a tus oídos!
8 »La tierra tembló y se estremeció;
los cimientos de los cielos se cimbraron;
¡se sacudieron por la indignación del Señor!
9 Humo salía de su nariz
y de su boca brotaba fuego destructor;
¡su furor inflamaba los carbones!
10 Inclinó los cielos, y bajó;
a sus pies había densas tinieblas.
11 Montó sobre un querubín, y voló;
¡voló sobre las alas del viento!
12 Se envolvió en un manto de sombras;
entre grises nubes, cargadas de agua.
13 ¡De su deslumbrante presencia salieron
ardientes ascuas que cruzaron las nubes!
los cimientos de los cielos se cimbraron;
¡se sacudieron por la indignación del Señor!
9 Humo salía de su nariz
y de su boca brotaba fuego destructor;
¡su furor inflamaba los carbones!
10 Inclinó los cielos, y bajó;
a sus pies había densas tinieblas.
11 Montó sobre un querubín, y voló;
¡voló sobre las alas del viento!
12 Se envolvió en un manto de sombras;
entre grises nubes, cargadas de agua.
13 ¡De su deslumbrante presencia salieron
ardientes ascuas que cruzaron las nubes!
14 »El Señor lanzó un poderoso trueno;
el Altísimo dejó escuchar su voz.
15 Lanzó sus flechas, y los dispersó;
¡lanzó relámpagos, y acabó con ellos!
16 El Señor dejó oír su reprensión,
¡y a la vista quedó el fondo de las aguas!
De su nariz salió un intenso soplo,
¡y a la vista quedaron los cimientos del mundo!
el Altísimo dejó escuchar su voz.
15 Lanzó sus flechas, y los dispersó;
¡lanzó relámpagos, y acabó con ellos!
16 El Señor dejó oír su reprensión,
¡y a la vista quedó el fondo de las aguas!
De su nariz salió un intenso soplo,
¡y a la vista quedaron los cimientos del mundo!
17 »Desde lo alto el Señor me tendió la mano
y me rescató de las aguas tumultuosas;
18 ¡me libró de los poderosos enemigos
que me odiaban y eran más fuertes que yo!
19 Me atacaron en el día de mi desgracia,
pero el Señor me dio su apoyo;
20 me llevó a un terreno espacioso,
y me salvó, porque se agradó de mí.
21 El Señor me premió porque soy justo;
¡porque mis manos están limpias de culpa!
y me rescató de las aguas tumultuosas;
18 ¡me libró de los poderosos enemigos
que me odiaban y eran más fuertes que yo!
19 Me atacaron en el día de mi desgracia,
pero el Señor me dio su apoyo;
20 me llevó a un terreno espacioso,
y me salvó, porque se agradó de mí.
21 El Señor me premió porque soy justo;
¡porque mis manos están limpias de culpa!
22 »Yo he seguido los caminos del Señor,
y ningún mal he cometido contra mi Dios.
23 Tengo presentes todos sus decretos,
y no me he apartado de sus estatutos.
24 Con él me he conducido rectamente,
y me he alejado de la maldad;
25 el Señor ha visto la limpieza de mis manos,
y por eso ha recompensado mi justicia.
y ningún mal he cometido contra mi Dios.
23 Tengo presentes todos sus decretos,
y no me he apartado de sus estatutos.
24 Con él me he conducido rectamente,
y me he alejado de la maldad;
25 el Señor ha visto la limpieza de mis manos,
y por eso ha recompensado mi justicia.
26 »Señor, tú eres fiel con el que es fiel,
e intachable con el que es intachable.
27 Juegas limpio con quien juega limpio,
pero al tramposo le ganas en astucia.
28 Tú salvas a los humildes,
pero humillas a los soberbios.
29 Señor, mi Dios,
tú mantienes mi lámpara encendida;
¡tú eres la luz de mis tinieblas!
30 ¡Con tu ayuda, mi Dios,
puedo vencer ejércitos y derribar murallas!
e intachable con el que es intachable.
27 Juegas limpio con quien juega limpio,
pero al tramposo le ganas en astucia.
28 Tú salvas a los humildes,
pero humillas a los soberbios.
29 Señor, mi Dios,
tú mantienes mi lámpara encendida;
¡tú eres la luz de mis tinieblas!
30 ¡Con tu ayuda, mi Dios,
puedo vencer ejércitos y derribar murallas!
31 »El camino de Dios es perfecto;
la palabra del Señor, acrisolada;
Dios es el escudo de los que en él confían.
32 ¡Aparte del Señor, no hay otro Dios!
¡Aparte de nuestro Dios, no hay otra Roca!
33 Dios es quien me infunde fuerzas;
Dios es quien endereza mi camino;
34 Dios es quien me aligera los pies,
y me hace correr como un venado.
Dios es quien me afirma en las alturas;
35 Dios adiestra mis manos para el combate,
y me da fuerzas para tensar el arco de bronce.
la palabra del Señor, acrisolada;
Dios es el escudo de los que en él confían.
32 ¡Aparte del Señor, no hay otro Dios!
¡Aparte de nuestro Dios, no hay otra Roca!
33 Dios es quien me infunde fuerzas;
Dios es quien endereza mi camino;
34 Dios es quien me aligera los pies,
y me hace correr como un venado.
Dios es quien me afirma en las alturas;
35 Dios adiestra mis manos para el combate,
y me da fuerzas para tensar el arco de bronce.
36 »Tú me diste el escudo de tu salvación,
y con tu bondad me engrandeciste.
37 Me pusiste sobre un terreno espacioso,
para que mis pies no resbalaran.
38 Así pude perseguir y alcanzar a mis adversarios,
¡y no volví hasta haberlos exterminado!
39 Los herí, y ya no se levantaron;
¡quedaron tendidos debajo de mis pies!
y con tu bondad me engrandeciste.
37 Me pusiste sobre un terreno espacioso,
para que mis pies no resbalaran.
38 Así pude perseguir y alcanzar a mis adversarios,
¡y no volví hasta haberlos exterminado!
39 Los herí, y ya no se levantaron;
¡quedaron tendidos debajo de mis pies!
40 »Tú me infundiste fuerzas para la batalla,
para vencer y humillar a mis adversarios.
41 Tú los hiciste ponerse en retirada,
y así acabé con los que me odiaban.
42 Clamaron a ti, Señor, pero no los atendiste;
¡no hubo nadie que los ayudara!
43 Los hice polvo, los deshice como a terrones;
¡los pisoteé como al lodo en las calles!
44 Tú me libraste de un pueblo rebelde,
y me pusiste al frente de las naciones.
Gente que yo no conocía, viene a servirme;
45 gente extraña me rinde homenaje;
¡apenas me escuchan, me obedecen!
46 ¡Gente de otros pueblos se llena de miedo
y sale temblando de sus escondites!
para vencer y humillar a mis adversarios.
41 Tú los hiciste ponerse en retirada,
y así acabé con los que me odiaban.
42 Clamaron a ti, Señor, pero no los atendiste;
¡no hubo nadie que los ayudara!
43 Los hice polvo, los deshice como a terrones;
¡los pisoteé como al lodo en las calles!
44 Tú me libraste de un pueblo rebelde,
y me pusiste al frente de las naciones.
Gente que yo no conocía, viene a servirme;
45 gente extraña me rinde homenaje;
¡apenas me escuchan, me obedecen!
46 ¡Gente de otros pueblos se llena de miedo
y sale temblando de sus escondites!
47 »¡Viva el Señor! ¡Bendita sea mi roca!
¡Exaltado sea el Dios de mi salvación!
48 Es el Dios que vindica mis agravios
y somete a las naciones bajo mis pies.
49 Es el Dios que me libra de mis adversarios,
que me eleva por encima de mis oponentes,
¡que me pone a salvo de los violentos!
50 Por eso alabo al Señor entre los pueblos,
y canto salmos a su nombre.
51 El Señor da la victoria al rey;
siempre es misericordioso con su ungido,
con David y con sus descendientes.»
¡Exaltado sea el Dios de mi salvación!
48 Es el Dios que vindica mis agravios
y somete a las naciones bajo mis pies.
49 Es el Dios que me libra de mis adversarios,
que me eleva por encima de mis oponentes,
¡que me pone a salvo de los violentos!
50 Por eso alabo al Señor entre los pueblos,
y canto salmos a su nombre.
51 El Señor da la victoria al rey;
siempre es misericordioso con su ungido,
con David y con sus descendientes.»
MES DE IYAR
El día 29 de abril dio inició al nuevo mes de Iyar, que es el segundo mes desde la salida del Pueblo de Israel de Egipto, en este mes declaramos :
El servicio a Dios además de traer bendiciones a nuestra vida como nuestro bienestar humano, también trae la recompensa espiritual de saber que estoy siendo útil para el Reino de los Cielos. Dios anhela que cada uno de nosotros dispongamos nuestra vida al servicio, no para gloriarnos de lo que hacemos, no para esperar a cambio un bien, sino mostrar con nuestro servicio lo agradecidos que estamos por lo que ha hecho en nuestra vida al habernos dado vida cuando estábamos muertos.
- Es el tiempo oportuno cuando Dios se puede manifestar como "Yo soy Tu Dios, Tu sanador". Éxodo 15:26 Yavhé Rafa "Y dijo: Si escuchas atentamente la voz del SEÑOR tu Dios, y haces lo que es recto ante sus ojos, y escuchas sus mandamientos, y guardas todos sus estatutos, no te enviaré ninguna de las enfermedades que envié sobre los egipcios; porque yo, el SEÑOR, soy tu sanador.”
El primer paso para recibir la sanidad de Dios es saber que el tiempo de los milagros no ha pasado, y que la sanidad física es parte del ministerio de Cristo hoy en día, y esto descansa en 5 verdades básicas
1.- DIOS es un sanador “Porque yo soy Yavhé tu sanador”. (Ex. 15:26) Y El jamás ha cambiado: “Porque yo Yavhé, no cambio”(Mal. 3:6)
2.- JESUCRISTO sanó a los enfermos “Recorría Jesús todas las ciudades y aldeas, enseñando en las sinagogas de ellos, y predicando el evangelio del reino, y sanando toda enfermedad y toda dolencia en el pueblo”. (Mt. 9:35), y Él Jamás ha cambiado:“Jesucristo es el mismo ayer, y hoy, y por los siglos” (Heb.13:8)
3.-Jesús mando a sus DISCÍPULOS a sanar a los enfermos. “Y yendo, predicad, diciendo: El reino de los cielos se ha acercado. Sanad enfermos, limpiad leprosos, resucitad muertos, echad fuera demonios; de gracia recibisteis, dad de gracia”. (Mt.10:7-8) Y un discípulo verdadero de Cristo hoy como en aquellos días: Jesús le dice: “Si vosotros permaneciereis en mi palabra, seréis verdaderamente mis discípulos” (Jn.8:31)
4.-Los milagros de sanidad fueron hechos por la IGLESIA PRIMITIVA “Porque de muchos que tenían espíritus inmundos, salían éstos dando grandes voces; y muchos paralíticos y cojos eran sanados” (Hch. 8:7) y la verdadera iglesia jamás ha cambiado y es ejemplo para la IGLESIA DE HOY, porque Jesús prometió estar con nosotros: “hasta el fin del mundo” (Mt. 28:20)
5.- Jesús comisionó A TODOS LOS CREYENTES, DE TODAS LAS NACIONES, HASTA EL FIN DEL MUNDO, para poner sus manos sobre los enfermos, prometiendo “ellos sanaran” Mr.16:15-18
- Es el mes conector entre tu redención (Pascua) y el dar tu ofrenda (Pentecostés).
Nuestro Pentecostés es la señal que estamos viviendo la llenura del Espíritu Santo, que estamos expectantes al regreso del Cristo que viene por su esposa, Están cerca las bodas del Cordero.
Es el tiempo oportuno para establecer tu curso para vigilar de manera que los secretos puedan revelarse.
- En este mes comienza a irradiar y permite que la revelación de Dios se incremente en tu vida.
Estamos llamados a romper con las estructuras religiosas, y a convertirnos en aquellos que llevarán de SU Gloria hasta lo último de la Tierra.
Dios nos dará nuevas estrategias de evangelización, la revelación de Dios que está en su Palabra comienza a transformar nuestras vidas, veremos con nuevos "ojos" sin vendas mágicas, ni ataduras, para poder movernos en lo sobrenatural.
- En este mes hacemos bien en vigilar y estar a la expectativa, para ir a otro nivel de revelación y provisión divina.
martes, 29 de abril de 2014
lunes, 28 de abril de 2014
DÍA 14 DE LA CUENTA DEL OMER
Hoy es el día 14, son dos semanas de la Cuenta del Omer
76 Dios es bien conocido en Judá;
grande es su nombre en Israel.
2 En Salén está su tabernáculo,
y en Sión está el lugar donde reside.
3 Allí hizo pedazos las saetas y los arcos,
los escudos, las espadas y las armas de guerra.
grande es su nombre en Israel.
2 En Salén está su tabernáculo,
y en Sión está el lugar donde reside.
3 Allí hizo pedazos las saetas y los arcos,
los escudos, las espadas y las armas de guerra.
4 ¡Glorioso eres tú, Señor, y más imponente que los montes!
5 Los valientes fueron despojados, y durmieron su sueño;
ningún valiente guerrero pudo defenderse.
6 Cuando tú, Dios de Jacob, los reprendiste,
jinetes y caballos quedaron desconcertados.
5 Los valientes fueron despojados, y durmieron su sueño;
ningún valiente guerrero pudo defenderse.
6 Cuando tú, Dios de Jacob, los reprendiste,
jinetes y caballos quedaron desconcertados.
7 Tú, mi Dios, inspiras temor;
en tu enojo, ¿quién puede sostenerse ante ti?
8 Desde los cielos dictaste tu sentencia;
la tierra tuvo miedo y se quedó en suspenso
9 cuando tú, mi Dios, te levantaste
para juzgar y salvar a los mansos de la tierra.
en tu enojo, ¿quién puede sostenerse ante ti?
8 Desde los cielos dictaste tu sentencia;
la tierra tuvo miedo y se quedó en suspenso
9 cuando tú, mi Dios, te levantaste
para juzgar y salvar a los mansos de la tierra.
10 La ira humana redunda en tu alabanza;
todos sus enojos se vuelven para ti una corona.
11 ¡Cumplamos a Dios el Señor nuestras promesas!
Todos los que rodean al Dios temible, ¡tráiganle ofrendas!
12 Dios abate el ánimo de los príncipes,
e infunde temor en los reyes de la tierra.
todos sus enojos se vuelven para ti una corona.
11 ¡Cumplamos a Dios el Señor nuestras promesas!
Todos los que rodean al Dios temible, ¡tráiganle ofrendas!
12 Dios abate el ánimo de los príncipes,
e infunde temor en los reyes de la tierra.
domingo, 27 de abril de 2014
DÍA 13 DE LA CUENTA DEL OMER
Hoy es el día 13, es una semana y seis días de la Cuenta del Omer.
5 Escucha, Señor, mis palabras;
toma en cuenta mis gemidos.
2 Mi rey y Dios, presta atención a mi clamor,
porque a ti dirijo mi oración.
3 Oh, Señor, por la mañana escucharás mi voz;
por la mañana me presentaré ante ti, y esperaré.
4 No eres un Dios que se complazca en la maldad;
los malvados no pueden habitar contigo.
5 Los perversos no pueden presentarse ante ti,
pues aborreces a todos los malhechores.
6 Tú, Señor, destruyes a los mentirosos,
y rechazas a los asesinos y mentirosos.
toma en cuenta mis gemidos.
2 Mi rey y Dios, presta atención a mi clamor,
porque a ti dirijo mi oración.
3 Oh, Señor, por la mañana escucharás mi voz;
por la mañana me presentaré ante ti, y esperaré.
4 No eres un Dios que se complazca en la maldad;
los malvados no pueden habitar contigo.
5 Los perversos no pueden presentarse ante ti,
pues aborreces a todos los malhechores.
6 Tú, Señor, destruyes a los mentirosos,
y rechazas a los asesinos y mentirosos.
7 Yo, por el contrario, y por tu gran misericordia,
puedo entrar en tu templo y alabarte reverente.
8 Guíame, Señor, en tu justicia,
y por causa de mis adversarios
endereza tu camino delante de mí.
9 Porque en sus labios no hay sinceridad;
dentro de ellos no hay más que maldad.
Su garganta es como un sepulcro abierto,
y su lengua sólo emite falsas alabanzas.
puedo entrar en tu templo y alabarte reverente.
8 Guíame, Señor, en tu justicia,
y por causa de mis adversarios
endereza tu camino delante de mí.
9 Porque en sus labios no hay sinceridad;
dentro de ellos no hay más que maldad.
Su garganta es como un sepulcro abierto,
y su lengua sólo emite falsas alabanzas.
10 ¡Castígalos, Dios mío!
¡Que sus propios errores los hagan caer!
¡Recházalos, por sus muchos pecados,
pues grande es su rebeldía contra ti!
11 Pero que se alegren todos los que en ti confían;
que griten siempre de júbilo, porque tú los defiendes;
que vivan felices los que aman tu nombre.
12 Tú, Señor, bendices al hombre justo;
tu favor lo rodea, como un escudo.
¡Que sus propios errores los hagan caer!
¡Recházalos, por sus muchos pecados,
pues grande es su rebeldía contra ti!
11 Pero que se alegren todos los que en ti confían;
que griten siempre de júbilo, porque tú los defiendes;
que vivan felices los que aman tu nombre.
12 Tú, Señor, bendices al hombre justo;
tu favor lo rodea, como un escudo.
DÍA 12 DE LA CUENTA DEL OMER
Es el día 12, es una semana y cinco días de la cuenta del OMER.
92 ¡Cuán bueno es alabarte, Señor!
Bueno es, Altísimo, cantar salmos a tu nombre,
2 anunciar tu misericordia por la mañana,
y tu fidelidad todas las noches,
3 en el decacordio y en el salterio,
y con tono suave en el arpa.
Bueno es, Altísimo, cantar salmos a tu nombre,
2 anunciar tu misericordia por la mañana,
y tu fidelidad todas las noches,
3 en el decacordio y en el salterio,
y con tono suave en el arpa.
4 Tú, Señor, me has alegrado con tus obras;
yo me regocijo por las obras de tus manos.
5 Muy grandes son tus obras, Señor,
y muy profundos tus pensamientos.
yo me regocijo por las obras de tus manos.
5 Muy grandes son tus obras, Señor,
y muy profundos tus pensamientos.
6 La gente necia no lo sabe;
la gente insensata no lo entiende:
7 si los impíos brotan como la hierba,
y todos los inicuos prosperan,
es para ser destruidos para siempre.
8 ¡Pero tú, Señor, por siempre estás en las alturas!
la gente insensata no lo entiende:
7 si los impíos brotan como la hierba,
y todos los inicuos prosperan,
es para ser destruidos para siempre.
8 ¡Pero tú, Señor, por siempre estás en las alturas!
9 Bien puedo ver, Señor, a tus enemigos;
bien puedo ver que tus enemigos perecerán,
¡que todos los malvados serán esparcidos!
10 Pero tú me darás las fuerzas del búfalo,
y me ungirás con aceite fresco.
11 Mis ojos verán la derrota de mis enemigos;
¡mis oídos oirán los gritos de angustia de mis adversarios!
bien puedo ver que tus enemigos perecerán,
¡que todos los malvados serán esparcidos!
10 Pero tú me darás las fuerzas del búfalo,
y me ungirás con aceite fresco.
11 Mis ojos verán la derrota de mis enemigos;
¡mis oídos oirán los gritos de angustia de mis adversarios!
12 Los justos florecerán como las palmeras;
crecerán como los cedros del Líbano.
13 Serán plantados en la casa del Señor,
y florecerán en los atrios de nuestro Dios.
14 Aun en su vejez darán frutos
y se mantendrán sanos y vigorosos
15 para anunciar que el Señor es mi fortaleza,
y que él es recto y en él no hay injusticia.
crecerán como los cedros del Líbano.
13 Serán plantados en la casa del Señor,
y florecerán en los atrios de nuestro Dios.
14 Aun en su vejez darán frutos
y se mantendrán sanos y vigorosos
15 para anunciar que el Señor es mi fortaleza,
y que él es recto y en él no hay injusticia.
viernes, 25 de abril de 2014
SHABBAT SHALOM
Hace mucho que no publicaba algo para SHABBAT, no por no hacerlo en familia, sino porque a veces damos por sentadas cosas que no lo están.
Hoy quiero elevar mi voz en un clamor por está hermosa semana que paso, dando las gracias a ABBA, por cada hora minuto y segundo de ella, pedir perdón por cada momento que no supe valorar o aprovechar conforme a su voluntad, clamo para que esta nueva semana que se inicia, el ETERNO sea proporcionándome autoridad y pueda redimir mi tiempo, sacarlo de las garras de Satanás y en sabiduría utilizar cada uno de esos 8640 minutos que me serán entregados para disfrutar, trabajar, servir y amar.
Que esos 8640 minutos sean de bendición no solo para mí sino para cada uno de los que me rodea.
El primer día es un día pleno porque valoraré el primer ministerio que el Señor nos entrego, la familia, será un día de paz de gozo, de fiesta, donde compartiremos el pan, no solo material sino el pan espiritual que es la Palabra llenando nuestros corazones y nuestros espíritus.
EL segundo día es llamado el día del Pacto, sabré que ese día sin importar lo que suceda mi Padre estará a mi favor.
EL tercer día será un día de plenitud, donde todas las puertas se abrirán a mi favor, ese día saldrán de la cueva todos aquellos sueños y proyectos que abandone por temor. Tengo la autoridad de llamar a lo que será para que sea.
EL cuarto día vendrá del Norte, del Sur, del Este y del Oeste, todo aquello que sirve para edificar mi casa no solo material sino espiritual, será día en que el río de Dios refresque mi vida mi casa y mi familia.
El Quinto día es un día de multiplicación, donde había escases habrá sobreabundancia y no habrá necesidad en ninguna de las casas de los Hijos del Rey.
EL sexto día es el día en que reconoceremos que nunca estaremos en nuestra posición de gobierno sino tenemos al Uno en nuestro corazón y que sin importar cuanto procuremos con nuestras fuerzas hacer, necesitamos la presencia del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo, para que no sea el hombre quien gobierne sino Dios mismo a través suyo.
El Séptimo día diré GRACIASSSSSSSSS porque hasta este día me acompaña el YO SOY. Y reposare sabiendo que a cada uno de mis días has añadido sabiduría y no calendarios. Y que en cada momento tu mano estuvo y estará a mi favor abriendo caminos.
Soy plantío del Señor soy trigo que esta madurando bajo su atenta mirada, no dejará que ni el frió ni las plagas vengan sobre mí, bajo su cuidado daré fruto bueno y en abundancia.
AMÉN. AMÉN y AMÉN.
EL MENSAJE DE LOS VIERNES "HOY ES UN BUEN DÍA PARA DECIR: TE AMO" DANTE GEBEL
“Si supiera que esta fuera la última vez que te vea salir por la puerta, te daría un abrazo, un beso y te llamaría de nuevo para darte más. Si supiera que esta es la última vez que voy a oír tu voz, grabaría cada una de tus palabras para poder oírlas una y otra vez indefinidamente. Si supiera que estos son los últimos minutos que te veo te diría “Te quiero” y no asumiría tontamente que ya lo sabes. Siempre hay un mañana y la vida nos da otra oportunidad para hacer las cosas bien, pero por si me equivoco y hoy es todo lo que nos queda, me gustaría decirte cuanto te quiero y que jamás te olvidaré” (Un pequeño homenaje al gran Gabo, Gabriel García Márquez)
Ya casi termino el libro, falta muy poco. Mientras tanto te regalo aquella pequeña charla; aquella que de alguna manera (y no preguntes cómo) llegó a mis oídos:
- Mamá…¿Qué haces cuando la persona que mas necesitas es la que mas lejos está de ti?
- La distancia no significa nada, hija, cuando alguien significa todo.
- No me refería a que está lejos geográficamente, sino que no puede estar tan cerca de mí como quisiera.
- ¿Te enamoraste?
- No lo se…la verdad es que me molesta sentir tantas cosas. Es increíble como una persona te puede cambiar el estado de ánimo. Él tiene ese extraño poder, una palabra suya, un gesto…y siento que cambia mi día.
- Uf! Se algo de eso. ¿Sientes que te entiende?
- Como ninguna otra persona en este mundo!
- Y bueno…amar es encontrar a alguien que te entienda sin dar demasiadas explicaciones. ¿Eso es lo que te molesta?
- No sé si me molesta…mas bien me enamora.
- Un gran hombre es ese alguien que despoja despacito tus secretos...es un señor, más que todo un ser humano que como nosotras tienen sus historias pasadas, bien o mal vividas. Un verdadero caballero no te quita la ropa, sino que te va robando los secretos que creías tener muy guardados, hasta que un día te deja con el corazón expuesto, desnudo.
- ¿Y eso es malo?
- Según quien sea. Cuando logra llegar a tu corazón, ya no hay mucho que puedas hacer. Por eso ruego que sea un caballero.
- ¿Lo dices por papá?
- Lo digo por todos los hombres. Aunque tu padre era muy especial.
- Cuando las mujeres decimos “muy especial” es porque hay cosas que no nos gustan.
- Hija, nadie es perfecto; ser hombre es…buscar dentro de su corazón el sentimiento que lo hace un caballero. Cuando encuentres al tuyo, te hará sentir sublime, amada. Todo lo demás, no tiene importancia.
- Y pensar que yo me prometí a mi misma que jamás me iba a volver a enamorar!
- Jaja, no puedes prometerte eso! No es algo que puedes manejar o razonar, hija. Ojalá fuese una decisión que se toma con la mente. El corazón es el que decide. Si eres difícil para enamorarte, la vida me ha enseñado lo que es la perseverancia de un buen hombre. “Si una gota de agua que insiste logra penetrar una roca, de forma inevitable se cuela por la más insignificante grieta y aunque la roca no quiera, logrará…
- …Bañar su corazón!” Conozco la frase. Eso solía decirlo papá.
- Él si fue un hombre perseverante, de esos que sin apuro…van adueñándose de a poquito de tus sentimientos, como un intruso, de esos que un día te dicen: “¿Señorita, sería tan amable de dejarme poner mi bolso en este rinconcito de su corazón?” y tú muy ingenua le respondes: “Claro, no puedo negarle eso a nadie”, pero luego de unos meses, se termina adueñando de todo y tú te preguntas ¿Cómo lo logró?
Un hombre apurado no logrará mucho, pero si realmente se toma su tiempo…logrará tenerte. No quedan muchos hombres así, son especies en extinción.
- ¿Papá era así?
- Tu papá era un niño.
- ¿Por?
- Porque la mayoría de los hombres siguen siendo niños. Sienten temores, tiemblan cuando nadie los ve, les gusta ser el centro de atención de la mujer que robó su corazón. Y así como son niños, te bajan la luna si desean conquistarte, bajan estrellas, no anotan fechas, olvidan aniversarios, son distraídos, pero con una mirada al alma te llevan hasta el cielo.
- ¿Y si luego me rompe el corazón? ¿Y si algún día me defrauda?
- Es un riesgo que las mujeres debemos correr. Si lo que te pasa es que tienes miedo, solo puedo decirte que si no pruebas no lo sabrás nunca. Tu padre solía decir: “¿Cómo vas a extrañar mis besos si no sabes cual es el sabor de mi boca? ¿Cómo vas a extrañar mis abrazos si no sabes como aprieto? ¿Cómo vas a extrañar olerme si no sabes cual es mi aroma? ¿Cómo vas a buscar refugiarte en mis brazos cuando el despertador suene si no estoy contigo en la mañana? ¿Cómo vas a extrañar mi saludo y mi regreso si ni siquiera me he despedido de ti?”
- Todo un poeta papá…¿estuviste perdidamente enamorada de él?
- ¿Acaso las mujeres sabemos amar de otra forma? A diferencia de algunos hombres, las mujeres no nos “enamoramos un poquito” ni tampoco “amamos a medias”. Eso es justamente lo que pone en constante peligro a nuestro corazón. Claro que lo amé perdidamente! Por eso, si realmente amas a este hombre, no dejes de hacérselo notar; estoy segura que el lo está necesitando.
- ¿ “Él” lo está necesitando? ¿Ni siquiera sabes quien es y resulta que ahora estás de su lado? Yo soy tu hija! ¿Lo recuerdas?
- Es que si ese hombre, sea quien sea, logró llegar a tu corazón, es alguien que merece tenerlo y punto.
- ¿Y “punto”? ¿Así resuelves las cosas? ¿Te vengo a contar que me siento confundida y tu solo me dices que a el le hace falta mi amor? ¿Y lo que yo siento no importa?
- Lo que tu sientes ya no tiene vuelta atrás. Es que conozco esa mirada y conozco a mi propia hija. No estás confundida, estás enamorada hasta el alma y no hay mucho mas que hacer, solo decírselo. Sea que te rompa el corazón o te lo cuide por el resto de tu vida…ya no es tuyo.
- En realidad entre nosotros nunca pasó nada, pero siempre hubo algo. Hay algo que ambos sentimos, que está allí, en el aire. Cuando yo le hablo, el me hace sentir que en ese momento no hay nada mas importante en todo el universo que aquello que le estoy diciendo. Está pendiente del mas mínimo detalle.
- Me sigues hablando así de él y me termino enamorando yo!
- Mamá!!!
- A propósito, ¿qué día es hoy?
- Viernes ¿por?
- Los viernes siempre son muy buenos para decir “Te amo”.
DÍA 11 DE LA CUENTA DEL OMER
Hoy es el día 11, es una semana y cuatro días de la Cuenta del Omer.
90 Dios nuestro,
¡tú siempre has sido nuestra casa!
2 Desde siempre y hasta siempre,
desde antes de que crearas
las montañas, la tierra y el mundo,
tú has sido nuestro Dios.
3 Tú marcas el fin de nuestra existencia
cuando nos ordenas volver al polvo.
4 Para ti, mil años pasan pronto;
pasan como el día de ayer,
pasan como unas horas de la noche.
5 Nuestra vida es como un sueño
del que nos despiertas al amanecer.
Somos como la hierba:
6 comienza el día,
y estamos frescos y radiantes;
termina el día,
y estamos secos y marchitos.
7 Si te enojas, nos asustas;
si te enfureces, nos destruyes.
8 Tú conoces nuestros pecados,
aun los más secretos.
9 Si te enojas, termina nuestra vida;
los años se nos escapan
como se escapa un suspiro.
10 Si las fuerzas nos ayudan,
podemos vivir setenta años,
y aun llegar a los ochenta;
pero no tiene sentido
que vivamos tanto tiempo:
esa vida de angustias y problemas
pasa pronto, lo mismo que nosotros.
¡tú siempre has sido nuestra casa!
2 Desde siempre y hasta siempre,
desde antes de que crearas
las montañas, la tierra y el mundo,
tú has sido nuestro Dios.
3 Tú marcas el fin de nuestra existencia
cuando nos ordenas volver al polvo.
4 Para ti, mil años pasan pronto;
pasan como el día de ayer,
pasan como unas horas de la noche.
5 Nuestra vida es como un sueño
del que nos despiertas al amanecer.
Somos como la hierba:
6 comienza el día,
y estamos frescos y radiantes;
termina el día,
y estamos secos y marchitos.
7 Si te enojas, nos asustas;
si te enfureces, nos destruyes.
8 Tú conoces nuestros pecados,
aun los más secretos.
9 Si te enojas, termina nuestra vida;
los años se nos escapan
como se escapa un suspiro.
10 Si las fuerzas nos ayudan,
podemos vivir setenta años,
y aun llegar a los ochenta;
pero no tiene sentido
que vivamos tanto tiempo:
esa vida de angustias y problemas
pasa pronto, lo mismo que nosotros.
11 La fuerza de tu furia
nadie ha llegado a conocerla.
¡Es tan grande tu enojo
como el temor que nos inspiras!
12 Enséñanos a pensar cómo vivir
para que nuestra mente
se llene de sabiduría.
nadie ha llegado a conocerla.
¡Es tan grande tu enojo
como el temor que nos inspiras!
12 Enséñanos a pensar cómo vivir
para que nuestra mente
se llene de sabiduría.
13 Dios nuestro,
¿hasta cuándo vas a abandonarnos?
¡Vuelve a ser nuestro Dios!
¡Compadécete de nosotros
pues somos tu pueblo!
14 ¡Permítenos comenzar el día
llenos de tu amor,
para que toda la vida
cantemos llenos de alegría!
15 Ya hemos tenido días de tristeza
y muchos años de aflicción;
¡devuélvenos esa alegría perdida!
16 ¡Permite que nosotros y nuestros hijos
podamos ver tu grandeza y tu poder!
¿hasta cuándo vas a abandonarnos?
¡Vuelve a ser nuestro Dios!
¡Compadécete de nosotros
pues somos tu pueblo!
14 ¡Permítenos comenzar el día
llenos de tu amor,
para que toda la vida
cantemos llenos de alegría!
15 Ya hemos tenido días de tristeza
y muchos años de aflicción;
¡devuélvenos esa alegría perdida!
16 ¡Permite que nosotros y nuestros hijos
podamos ver tu grandeza y tu poder!
17 Dios nuestro,
¡muéstranos tu bondad,
y bendice nuestro trabajo!
¡Sí, bendice nuestro trabajo!
¡muéstranos tu bondad,
y bendice nuestro trabajo!
¡Sí, bendice nuestro trabajo!
jueves, 24 de abril de 2014
miércoles, 23 de abril de 2014
DÍA 8 DE LA CUENTA DEL OMER
Hoy es el día 8, que son 1 semana y un día de la cuenta del Omer.
Salmo 103
1 Que todo lo que soy alabe al Señor;
con todo el corazón alabaré su santo nombre.
2 Que todo lo que soy alabe al Señor;
que nunca olvide todas las cosas buenas que hace por mí.
3 Él perdona todos mis pecados
y sana todas mis enfermedades.
4 Me redime de la muerte
y me corona de amor y tiernas misericordias.
5 Colma mi vida de cosas buenas;
¡mi juventud se renueva como la del águila!
con todo el corazón alabaré su santo nombre.
2 Que todo lo que soy alabe al Señor;
que nunca olvide todas las cosas buenas que hace por mí.
3 Él perdona todos mis pecados
y sana todas mis enfermedades.
4 Me redime de la muerte
y me corona de amor y tiernas misericordias.
5 Colma mi vida de cosas buenas;
¡mi juventud se renueva como la del águila!
6 El Señor da rectitud
y hace justicia a los que son tratados injustamente.
y hace justicia a los que son tratados injustamente.
7 Dio a conocer su carácter a Moisés
y sus obras al pueblo de Israel.
8 El Señor es compasivo y misericordioso,
lento para enojarse y está lleno de amor inagotable.
9 No nos reprenderá todo el tiempo,
ni seguirá enojado para siempre.
10 No nos castiga por todos nuestros pecados;
no nos trata con la severidad que merecemos.
11 Pues su amor inagotable hacia los que le temen
es tan inmenso como la altura de los cielos sobre la tierra.
12 Llevó nuestros pecados tan lejos de nosotros
como está el oriente del occidente.
13 El Señor es como un padre con sus hijos,
tierno y compasivo con los que le temen.
14 Pues él sabe lo débiles que somos;
se acuerda de que somos tan sólo polvo.
15 Nuestros días sobre la tierra son como la hierba;
igual que las flores silvestres, florecemos y morimos.
16 El viento sopla, y desaparecemos
como si nunca hubiéramos estado aquí.
17 Pero el amor del Señor permanece para siempre
con los que le temen.
¡Su salvación se extiende a los hijos de los hijos
18 de los que son fieles a su pacto,
de los que obedecen sus mandamientos!
y sus obras al pueblo de Israel.
8 El Señor es compasivo y misericordioso,
lento para enojarse y está lleno de amor inagotable.
9 No nos reprenderá todo el tiempo,
ni seguirá enojado para siempre.
10 No nos castiga por todos nuestros pecados;
no nos trata con la severidad que merecemos.
11 Pues su amor inagotable hacia los que le temen
es tan inmenso como la altura de los cielos sobre la tierra.
12 Llevó nuestros pecados tan lejos de nosotros
como está el oriente del occidente.
13 El Señor es como un padre con sus hijos,
tierno y compasivo con los que le temen.
14 Pues él sabe lo débiles que somos;
se acuerda de que somos tan sólo polvo.
15 Nuestros días sobre la tierra son como la hierba;
igual que las flores silvestres, florecemos y morimos.
16 El viento sopla, y desaparecemos
como si nunca hubiéramos estado aquí.
17 Pero el amor del Señor permanece para siempre
con los que le temen.
¡Su salvación se extiende a los hijos de los hijos
18 de los que son fieles a su pacto,
de los que obedecen sus mandamientos!
19 El Señor ha hecho de los cielos su trono,
desde allí gobierna todo.
desde allí gobierna todo.
20 Alaben al Señor, ustedes los ángeles,
ustedes los poderosos que llevan a cabo sus planes,
que están atentos a cada uno de sus mandatos.
21 ¡Sí, alaben al Señor, ejércitos de ángeles
que le sirven y hacen su voluntad!
22 Alabe al Señor todo lo que él ha creado,
todo lo que hay en su reino.
ustedes los poderosos que llevan a cabo sus planes,
que están atentos a cada uno de sus mandatos.
21 ¡Sí, alaben al Señor, ejércitos de ángeles
que le sirven y hacen su voluntad!
22 Alabe al Señor todo lo que él ha creado,
todo lo que hay en su reino.
Que todo lo que soy, alabe al Señor.
Suscribirse a:
Entradas (Atom)