Con esta Luna Nueva
comienza un nuevo ciclo, un nuevo mes, llamado mes de Iyar, comenzando este
nuevo año, marcado proféticamente como un tiempo de Manifestación de los Hijos
de Dios, el primer mes la orden fue dejar de parecer para ser, sacándonos
nuestras mascaras y todo aquello que nos impide manifestarnos como
tales, desde la religiosidad, hasta nuestras propias escusas.
Estos tres primeros meses
son de posicionamiento, durante todo el año anterior nuestro Padre nos mostró
en cada paso que nos respalda nos levanta y nos prepara para este nuevo ciclo.
Además será un año que se caracterice por la unción y
las reformas de Josías y la valentía y determinación de Jehú. Será una
generación entendida en las alturas y gobierno de Dios. Esto traerá juicio
sobre los lugares altos. Los montes, su gobierno y su influencia serán
juzgados. Vienen juicios sobre La idolatría pagana pero también la idolatría
disfrazada que está orientada a la adoración al hombre, al natural así como a
los hombres de Dios. Idolatría a Dogmas y conceptos que Dios nunca habló. La
adoración a los bienes de este mundo.
Los
poderes Babilónicos y Jezabélicos será fuertemente sacudidos con toda su
constelación que los conforma. Dios levantará gente con espíritu humilde y
enseñable. Gente como Josías con un corazón tierno y humillado ante Dios. Será
una nueva generación que como Jehú que arremete con violencia sobre la casa de
Acab y de Jezabel para traer un gobierno santo. El temor de Dios será
estandarte para esta generación la cual no será detenible.
Este
nuevo mes el de Iyar es un mes para sacarnos de encima aquello que no nos deja
brillar.
“sino que todos ustedes son hijos de la luz e hijos
del día. No somos de la noche ni de la oscuridad, 6 así que no durmamos como los demás,
sino mantengámonos atentos y sobrios. 7 Los que duermen, de noche duermen;
los que se embriagan, de noche se embriagan; 8 pero nosotros, los que somos del día,
debemos ser sobrios, ya que nos hemos revestido de la coraza de la fe y del
amor, y tenemos como casco la esperanza de la salvación. 9 Dios no nos ha puesto para sufrir el
castigo, sino para alcanzar la salvación por medio de nuestro Señor Jesucristo, 10 quien murió por nosotros para que,
despiertos o dormidos, vivamos unidos a él. 11 Por lo tanto, anímense y edifíquense
unos a otros, como en efecto ya lo hacen. 1º Tesalonicenses 5:5-11
“Escriban esto para que lo sepan las generaciones que no han nacido y para que en el futuro ellas alaben al Señor. El Señor miró desde su santuario en el cielo; se asomó a la tierra, para escuchar las oraciones del prisionero, para liberar a los condenados a muerte; para que en Sion se proclame el nombre del Señor, y lo alaben en Jerusalén cuando las naciones y los reinos se reúnan para adorar al Señor. Salmo 102:18-22
Habrá infinitas manifestaciones de la presencia de Dios en Luz.
Esto es primeramente para abrir el entendimiento de los hijos de Dios y puedan
ver su relevancia en las naciones. Estas manifestaciones traerán un despertar
profético y apostólico conforme a los diseños del cielo. Iluminarán la
interpretación de las Escrituras para ver verdades ocultas y sacar a la luz las
que han sido distorsionadas. Muchas falsas teologías serán expuestas y caerán.
Tomemos toda autoridad que ya nos fue dada y como
tal saquemos de nuestras vidas aquellas cosas que ensombrecen la gloria del
Padre, es tiempo de SER LUZ.
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