CUARTO MES O TAMMUZ

Hoy comenzamos un nuevo mes, llamado el cuarto mes o como lo llamo el pueblo judío en el exilio Tammuz, éste para ellos era un tiempo de duelo, ya que en el fueron derrumbados los muros de Jerusalén,  un tiempo en que se llaman a ayunar el día 17 ya que no solo los muros cayeron, ,el templo fue destruido y la ciudad fue tomada, sino que fueron dos veces en que esto aconteció.
Pero, para nosotros quienes pueden decir:

«Tenemos una ciudad fuerte;

para salvarnos,

el Señor levantó murallas y fortificaciones. 

Abran las puertas para que pase una nación justa

que se mantiene fiel.

Señor, tú conservas en paz a los de carácter firme,

porque confían en ti. 

Confíen siempre en el Señor,

porque él es refugio eterno. 

Él hace caer a los orgullosos,

y humilla a la ciudad soberbia

derribándola hasta el suelo, 

para que los humildes y los pobres

la pisoteen con sus pies.» Isaías 26

Podemos decir, que nuestro Muro y antemuro es la SALVACIÓN de nuestro Señor.
Y que la NUEVA JERUSALÉN, la hermosa y gloriosa tiene cimientos firmes que no pueden ser destruidos.
También es en este tiempo donde los doce espías fueron enviados por Moisés a la tierra prometida para que  trajeran evidencia de lo que el Señor les entregó.
Diez de ellos dijeron ES IMPOSIBLE, pero dos de ellos tomaron la PROMESA sin importar lo que sus ojos vieran sino confiando en la PALABRA del PADRE.

"—La tierra que exploramos es una tierra muy buena. Si el SEÑOR está satisfecho con nosotros, él nos llevará a esta tierra y nos la dará; es una tierra que rebosa de leche y miel. Así que no se rebelen contra el SEÑOR, y no le tengan miedo a la gente de esa tierra porque los derrotaremos fácilmente. Ellos no tienen quien los proteja, en cambio el SEÑOR está con nosotros, así que no hay que tenerle miedo a esa gente. Números 14: 4-9

Ante tal declaración, el pueblo se puso a hablar contra ellos, el Señor se enfureció por el desprecio que hacían a sus promesas ,luego del ruego de Moisés:

El SEÑOR dijo:—Yo los perdono, así como me pides,  pero mientras yo viva y toda la tierra esté llena de la gloria del SEÑOR, hago esta promesa: Todos los que vieron mi gloria y los que vieron los milagros que hice en Egipto y en el desierto, me han probado estas diez veces y no me obedecieron.  Todos ellos, todos los que me despreciaron, no verán la tierra que les prometí a sus antepasados, no entrarán en esa tierra. En cambio, mi siervo Caleb se ha portado distinto, pues él me sigue completamente. Por eso lo llevaré a la tierra que estuvo explorando y sus descendientes la poseerán. Los amalecitas y los cananeos están viviendo en el valle. Así que ustedes, mañana den vuelta y vayan al desierto por el camino del mar Rojo.

Números 14:20-25

Finalmente sabemos que esa generación incluido Moisés no pudo tomar lo que se les prometió por no creer. Muchos cuentan este relato como ejemplo de la desobediencia, pero pocos toman valor a lo que dice el Señor no solo a ese pueblo sino a todos hoy en día.

MIENTRAS YO VIVA Y TODA LA TIERRA ESTÉ LLENA DEL LA GLORIA DEL SEÑOR

 HAGO ESTA PROMESA.

TODOS LOS QUE VIERON MI GLORIA Y LOS QUE VIERON MIS MILAGROS,

 Y ME HAN PROBADO Y NO ME OBEDECIERON. 

A TODOS ELLOS, LOS QUE ME DESPRECIARON NO ENTRARÁN A LA TIERRA QUE PROMETÍ. 

En este mes que iniciamos recordemos más que nunca la promesa hecha por Jesucristo a nosotros, los HIJOS DE DIOS.

 Entonces el Rey dirá a los de su derecha: Venid, benditos de mi Padre, heredad el reino preparado para vosotros desde la fundación del mundo.Mateo 25:34

AMÉN